Oportos de ensueño: el nuevo siglo de Kopke

Texto: Rosa María González Lamas. Fotos: Viajes & Vinos y Kopke (C)

El pasado agosto el vino de Oporto honraba los medios siglos añadiendo a su palmarès de viejas joyas embotelladas las nuevas categorías de envejecimiento 50 Years Old White Port y 50 Years Old Tawny Port. Es un renombre que encumbra aún más el placer de saborear la historia que gota a gota ha ido escribiéndose con silencio y paciencia entre maderas, para preservar en la memoria una excepcionalidad, cada vez más valorada en el mundo del vino, sediento de cepas viejas y añadas antiguas entre la paradoja de que cada vez se margine más a la gente mayor.

Afortunadamente los consumidores de Oporto valoran cada vez más los vinos añejos, y por ello casas históricas como Kopke se esmeran en redactar su historia con añadas excepcionales que merece la pena preservar, para poder volverlas a celebrar en otro momento.

Por eso, en 2022, Kopke se remonta medio siglo atrás para encapsular el tiempo en botella, con una fantástica muestra que captura la esencia de esas nuevas categorías con medio siglo de existencia y su compromiso con el buen quehacer, en “tawny” y en blanco.

Son el Kopke 50 Years Old White y el Kopke 50 Years Old Tawny, vinos que celebran la sabiduría del tiempo y revelan, en cada botella pintada a mano, el legado de medio siglo de historia y del arte del ensamblaje  ---el estandarte de los vinos de Oporto con indicación de edad---, y del talento del enólogo que sabe descifrar el labertino de vino en las barricas para crear una obra de arte con la paleta de colores de cada partida, un encaje líquido con finura, sabor, hermosura y consistencia para reflejar las mejores pinceladas del vino y  el perfil identitario de una bodega a lo largo del tiempo.

La bóveda de tesoros de Kopke precisamente se distingue por la rareza y longevidad de sus vinos, de añadas excepcionales, lo que permite un trabajo de acompañamiento muy especial para garantizar que éstos evolucionen en complejidad, preservando la riqueza aromática que les identifica. Es precisamente ese patrimonio líquido lo que ha permitido a esta casa centenaria dar un paso adelante en la recién creada categoría de 50 Años, embotellando no solo un Tawny, sino también un vino blanco con indicación de esa edad, una suma de 100 años que ubican a Kokpe en una posición de vanguardia.

Así el pasado forja más historia, creando de extraordinarios vinos viejos un vino nuevo con el gusto antiguo que duplica lo excepcional: la edad en la etiqueta es el perfil que la edad promedio del ensamblaje debería tener.